Había venido un poco de calma al infierno que se había desatado en la gran Tenochtitlan, por algún motivo los extranjeros dejaron de utilizar sus tubos de humo que lanzaban piedras grandes y pequeñas y que destrozaban los muros defensivos y las casas, ese descanso era poca cosa, pero era algo; la enfermedad que habían […]
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