Un fideicomiso es una figura legal y financiera, en la que intervienen 3 personas o instituciones: un fideicomitente qué es el que entrega el dinero o los bienes a un fiduciario qué es una institución financiera qué ha sido aprobada para trabajar en fideicomisos y un fideicomisario qué es el destinatario de los beneficios de ese dinero o bienes
El fideicomiso tiene cómo intención qué el dinero o los bienes, sean destinados a un fin específico. Así por ejemplo a un menor de edad que recibe una herencia en fideicomiso, los beneficios se le entregarán parcialmente a sus padres bajo la revisión de qué se destine a los intereses del menor
Los gobiernos suelen utilizar la figura del fideicomiso para destinar parte del dinero público a un fin específico y así, entregan ese dinero a la fiduciaria y ésta se encargará de que el dinero llegue a los beneficiarios de acuerdo a las especificaciones del mismo fideicomiso
En México, durante sexenios se estuvieron formando fideicomisos para fortalecer áreas específicas de la sociedad como la agricultura, la ciencia, el deporte, las artes, los perjudicados por desastres naturales, la protección de periodistas o defensores de Derechos Humanos y muchos más. Es claro que estos fideicomisos se formaron con la intención de qué el dinero público, de los mexicanos, estuviese vigilado por una fiduciaria y destinado a un fin específico
El Gobierno actual se ha propuesto acabar con estos fideicomisos bajo el argumento de qué hay corrupción en su manejo. No eliminó la posibilidad de que exista esa corrupción, pero ¿porqué en vez de eliminar los factores de corrupción y sancionar a los corruptos? qué es lo que la elemental razón indica, se quieren extinguir los fideicomisos, es algo que escapa a la lógica.
Hay más de 60000 millones de pesos involucrados en eso y el Gobierno actual, debido a un pésimo manejo del dinero de los mexicanos, aunado a los efectos de la pandemia, se encuentra en quiebra y le urge dinero para seguir con sus proyectos.
Al extinguirse los fideicomisos el dinero de estos se destinará a a un area denominada Ramo 23 que se encuentra a disposición del presidente, quien tiene una gran libertad de acción debido a los mínimos controles que se dan en esos fondos públicos.
Al implicar una reforma presupuestal, la extinción de los fideicomisos debe pasar por el Congreso el que con la mayoría del partido MORENA del presidente, ha aprobado ya la disposición de esas decenas de miles de millones de pesos de los mexicanos, los que van a quedar a disposición de la Presidencia de la República y sin ningún control, pues en ningún momento se ha dado a conocer cuáles seran los protocolos y los caminos que se han planteado para el destino de esos fondos.
Esto explica la oposición por parte de los beneficiados por los fideicomisos, la sociedad civil y los partidos políticos no afines al presidente han planteado, pues a primera vista lo que se observa es un grave robo a la nación qué pretende ocultarse bajo la supuesta buena voluntad del presidente López Obrador.
Lo anterior se fortalece cuando observamos que luego que el Congreso aprobó la extinción de los fideicomisos, el presidente ordenó una auditoria sobre el manejo de estos y que “frente a evidencias de corrupción, de mal manejo”, se procederá.
Si hasta ahora se plantea una auditoría, es evidente que la afirmación que los fideicomisos eran corruptos, carecía de un sustento técnico y de un estudio que la avalara, lo que fortalece la hipótesis que esto obedece a una insana intención del presidente de México y los congresistas que han apyado esa medida.
Crédito de la imágen: Pixbay